domingo, 13 de enero de 2013

Verbos


Formas de emplear "ves" y "vez"


Pese a ser un asunto muy simple, existen todavía equivocaciones al emplear estos términos sea en la escritura o pronunciación, es decir un error por cuestión de forma. Sin embargo, es necesario esclarecer las diferencias que hay entre ambas palabras.

Ves: es la palabra concerniente al verbo "ver", en la cual se refiere a la segunda persona del singular, en tiempo presente e indicativo de este verbo.

Ejemplo: Ves muy bien y sin anteojos.

Vez: se relaciona con el tiempo u ocasiones. Tiene los siguientes significados:
  •      Es la relación por turnos o mediante un orden establecido.


 Ejemplo: Esta vez la máquina selecciona sólo un elemento para ser analizado.

  •     Cada una de las repeticiones que tienen lugar cuando se vuelven a producir.

 Ejemplo: Javier llega más cansado cada vez que da una vuelta con el auto.

Uso correcto de la letra H


La letra H es la séptima consonante del alfabeto español, También conocida como la consonante muda, porque no pose sonido propio.

La letra H no se pronuncia, pues no representa ningún fonema (es muda), con la excepción cuando está en el dígrafo «ch» y en algunas palabras extranjeras, como es el caso de la palabra hámster, un extranjerismo  proveniente del alemán.
 
Se escribe h al inicio de palabras que comienzan con diptongo, si la primera vocal es i ó u.
Ejemplos: hielo, hueco

Se escribe h al inicio de palabras que empiezan con los sonidos “idr”, “iper”, “ipo”.
Ejemplos: hidroeléctrica, hiperactivo, hipódromo.

Cuando entre dos sílabas de una palabra, la primera termina con consonante y la segunda empieza en vocal, se escribe con h.
Ejemplos: anhelo, exhibición, exhortar, inherente, inhalación

Excepciones: Cuando la primera sílaba es un prefijo y la palabra a la que se le añade no lleva h.
Ejemplo: inadecuado

Se escriben con h intermedia las palabras que presentan tres vocales contiguas, de las cuales la segunda y la tercera forman un diptongo con u inicial.
Ejemplos: ahuecar, rehuir

Se escriben con h las palabras que en el español antiguo tuvieron f.
Ejemplos: fermoso - hermoso / facer - hacer

Se escribe con h todas la palabras que comienzan con las letras (um) seguidas de una vocal.
Ejemplos: humanidad, húmero, humillante

Los siguientes prefijos griegos se escriben con h. hecto-, hemi-, hepta-, hetero-, hexa-, higro-
Ejemplos: hectolitro, heterogéneo 

Importancia de la acentuación


                                               Ver photo.JPG en presentación
Uno de los errores más frecuentes que existe en la redacción es el que está relacionado con la colocación de las tildes.

Lo primero que hay que establecer es que la acentuación pertenece única y exclusivamente al habla; es una noción fonética, prosódica; es decir que siempre está presente en todas las palabras que pronunciamos.

Por naturaleza, cuando pronunciamos una palabra, dentro de ella hay una sílaba en la que recae la fuerza de la pronunciación; esa vocal se denomina tónica, de tono-fuerza y las demás son átonas, sin tono-fuerza.

Todas las palabras, por ende, tiene sus acentos; lo que sucede es que en la escritura la tilde se marca de acuerdo con ciertas reglas generales y particulares.

En nuestro idioma, hay que marcarle las tilde a todas las palabras que lo admitan (así sean minúsculas o mayúsculas), ya que en nuestra lengua la tilde le cambia el significado a las palabras.
El acento.

Cuando articulamos una palabra, inevitablemente pronunciamos una sílaba con mayor fuerza o intensidad que las demás. Por ejemplo, en las palabras vejez, rojo y pago hay sílabas que se pronuncian con mayor fuerza que las demás.

Esa diferencia de fuerza o intensidad determina una diferencia fonética, o sea, que una sílaba resalta en cada expresión, con respecto a las demás. Pues bien, esa mayor fuerza con que pronunciamos una sílaba en cada palabra, es el acento. Y la sílaba que realzamos mediante el acento se llama tónica, las demás reciben el nombre de átonas.

El acento es de naturaleza fonética por lo que corresponde al habla, a la pronunciación. Esto implica que el acento siempre se pronuncia. Es decir, éste siempre es prosódico (parte de la gramática que enseña la correcta pronunciación). Pero el acento puede diferenciar el significado de algunas palabras, según varíe la sílaba tónica (la posición del acento en la palabra).

1-Líquido----liquido------liquidó.
2-Insulto----insultó.

Es precisamente la función fonológica (rama de la lingüística que estudia los elementos fónicos, atendiendo a su valor distintivo y funcional) que tiene el acento en español, lo que explica la importancia de indicar la sílaba tónica en la escritura. En el habla, la sílaba tónica se marca por la diferencia de intensidad.

La tilde:

La tilde (´) corresponde a la escritura. Es la representación gráfica de del acento. Pero no en todas ocasiones, la sílaba tónica de las palabras escritas se señala con tilde. De ahí, la necesidad de establecer reglas que pauten su uso.

Cómo se logra el uso adecuado de la tilde:

Si desea dominar, me imagino que sí, plenamente el problema de la acentuación, solo tiene que seguir estas cinco pautas:

Cree el hábito de identificar la sílaba tónica:

No es posible señalar el acento con certeza, si no se sabe cuál es la sílaba tónica. Por eso, lo primero que hay que hacer es desarrollar la habilidad de ubicar el acento en las palabras, y crear ese hábito.

El procedimiento más sencillo, cuando se tiene dudas para determinar la sílaba tónica, es pronunciar la palabra cuantas veces como sílabas tenga. Por exclusión, se elegirá aquella pronunciación que no nos resulte extraña. O sea, se descartan aquellas pronunciaciones que suenen extrañas, hagamos un ejercicio breve:

A)-Míercoles-----miércoles---miercoles----miercolés.

Con este simple ejercicio nos damos cuenta qué sílaba es la tónica.

Aprenda y tenga pendiente las reglas generales de acentuación:

La identificación de la sílaba tónica es sólo la base para la aplicación de las reglas de acentuación. Ahora procederemos a estudiar esas reglas, para luego emplearlas constantemente.

Uso de las mayúsculas

La forma normal de escribir es haciéndolo en letras pequeñas llamadas minúsculas. Las letras mayúsculas son las que en relación a las letras minúsculas, tiene un mayor tamaño y generalmente se escriben de forma diferente.
La finalidad de escribir en mayúsculas es para resaltar determinadas palabras u oraciones que deseamos que llame la atención del lector. Ahora bien, existen numerosos casos en que es correcto y hasta necesario escribir en mayúsculas y otros en que no lo es. A continuación te presentamos un conjunto de reglas básicas que te ayudarán a saber cuándo debes escribir en letras mayúsculas.
  1. Al inicio de la oración y seguido del signo de puntuación
    La primera letra de la oración siempre va en mayúscula y también luego del signo de puntuación. Asimismo, en ciertos casos se escriben en mayúsculas luego de los dos puntos.

    Ejemplos. Hoy debo ir al colegio. Mañana tengo mis clases de piano.

    Antonio dijo: "Será un día especial".
  2. En los nombres y las siglas:
    Se escriben con mayúsculas, todos los nombres propios y los nombres comunes que se utilizan para designar a una persona en lugar del nombre propio. También se escriben en mayúscula aquellos artículos y adjetivos que acompañan a estos nombres.

    Ejemplos. Beatriz, el Mantuano (por Virgilio), FBI (Federal Bureau of Investigation).
  3. En palabras o frases enteras
    Se escriben con mayúsculas los títulos de los libros impresos y sus respectivos capítulos, también las cabeceras de periódicos y revistas y en la inscripción en los monumentos.

    Ejemplos. LA NACIÓN.
  4. En nombres o palabras de importancias en ciertas disciplinas
    Las palabras o nombres importantes en alguna disciplina del saber humano se escriben con mayúsculas. Así también los nombres de zonas geográficas, de divinidades religiosas, galaxias, marcas comerciales, espacios urbanos, los nombres de épocas históricas, los nombres de entidades, los signos del zodiaco y otros.

    Ejemplos. América, Jehová, Vía Láctea, Nike, paseo de Recoletos, Edad de Piedra, etc.
  5. En los textos especializados:
    En los textos que pertenecen a una disciplina en particular, como los documentos jurídicos o los administrativos, se escriben en mayúsculas aquellos verbos que presentan el objetivo principal de dichos textos. Se trata frecuentemente de sentencias, decretos, bandos, edictos, y otros.

    Ejemplos. EXPONE, SOLICITA.

  6. Las mayúsculas y el uso de los tildes
    El uso de las mayúsculas no impide la acentuación de las palabras. Únicamente las siglas no llevan tilde.

Clasificacion de palabras por el acento.


       
Las palabras se dividen, de acuerdo a la ubicación que en ellas tenga el acento prosódico, en:

o    agudas

o    graves o llanas

o    esdrújulas

o    sobreesdrújulas

Palabras agudas son las que van acentuadas (prosódicamente) en la última sílaba.
Ejemplos: cantar beber alfiler

Palabras graves o llanas son las que llevan el acento prosódico en la penúltima sílaba.
Ejemplos: beso conde muchacha

Palabras esdrújulas son las que llevan el acento prosódico en la antepenúltima sílaba.
Ejemplos: cómico ósculo barómetro

Palabras sobreesdrújulas son las que llevan el acento prosódico en la sílaba anterior a la antepenúltima.
Ejemplo: arrebatándoselo

Existe también un caso especial, que es el que presentan los monosílabos (palabras de una sola sílaba). Los monosílabos son considerados (por las reglas de clasificación) como palabras agudas.

    
Agudas

Ejemplos
a - mor
re - loj
can - tó
pa - pel

Estas palabras llevan tilde (acento gráfico) cuando terminan en n, s o vocal.

Ejemplos
jar - dín
des - ta - có
bai - ló

GravesEjemplos
Gó - mez
sa - po
cor - ti - na

Las palabras graves llevan tilde cuando terminan en cualquier consonante, menos n o s.

Ejemplo
lá - piz
cár - cel
dé - bil

Esdrújulas

Ejemplos
má - gi - ca
pá - ja - ro
ma - mí - fe - ro
mú - si - ca
ma - te - má - ti - ca

Sobresdrújulas

Ejemplos
dí - ga - me - lo
trái - ga - se - lo
dí - ga - se - lo
pá - sa - me - lo
jué - ga - te - la

 

Signos de puntuación

  

Pirámide de la puntuación propuesta por Ros Wilson.
Los signos de puntuación delimitan las frases y los párrafos y establecen la jerarquía sintáctica de las proposiciones, consiguiendo así estructurar el texto, ordenar las ideas y jerarquizarlas en principales y secundarias, y eliminar ambigüedades.
Por eso requieren un empleo muy preciso; si se ponen en el lugar equivocado, las palabras y las frases dejan de decir lo que el autor quería decir.
La puntuación varía según el estilo de escritura; sin embargo, las diferencias de estilo que se puedan presentar no eximen a nadie de cumplir con ciertas normas mínimas y de evitar errores generalmente considerados como inaceptables. De ahí la importancia de conocer y aplicar las normas básicas de la puntuación.
No obstante, hay que advertir que más allá de cualquier norma establecida, los signos de puntuación componen también la arquitectura del pensamiento escrito. En este sentido, y tal y como sucede en poesía desde hace más de un siglo, no existen normas exactas para reglamentar el correcto uso de los signos en las partituras, tanto narrativas como poéticas. En términos de principios y parámetros, los signos de puntuación entrarían a formar parte de los parámetros del lenguaje, y en consecuencia se sitúan en un proceso de constante evolución y son variables que pueden depender de otros factores.
Si la finalidad última es la comunicación, podría resultar paradójico encontrarnos con licencias ortográficas que no respetan el modo convencional de escritura y que, sin embargo, expresan a la perfección los conceptos y los ritmos internos, invisibles de otra manera. Como ejemplo de variable «en el extremo» se situarían los cambios en las formas de escritura que están imponiendo los nuevos medios de comunicación, chat, blog, SMS... que más que atacar a las viejas estructuras del lenguaje realizan de él un uso específico, adecuado a la velocidad y otras características del medio en cuestión; aun cuando lo correcto es respetar el uso de los signos de puntuación y evitar la degradación de la lengua castellana por modismos y anglicismos.